Nos vamos de acampada urbana porque igualmente aprobaremos el curso
Los secesionistas catalanes han sobrepasado todos los límites permitidos en cualquier sociedad democrática.
Jordi Pujol, el padre de todo este despropósito, que pasito a pasito, suave, suavecito, y sin que ningún español metido a político se diera apenas cuenta, iba minando, socavando y aleccionando a toda esta prole de enfermos, que ni ellos mismos saben ni lo que quieren, ni por lo que luchan, pero eso sí, saben luchar y destrozar a las mil maravillas.
Desde Pujol hasta el Quim, todos los presidentes que han pasado por el gobierno son culpables de esta guerra, el maldito 3% es sin ninguna duda la causa de nuestros males actuales con Cataluña, ahí hay mucha mierda que tapar y esa mierda nos la estamos tragando todos.
Se les ha ido dando, se les ha ido concediendo, se les ha dejado hacer, se han dejado las competencias de educación en sus manos para que estuvieran quietos, y el resultado es este, miles de niñatos y no tan niñatos aleccionados, y con una violencia muy bien instruida y sin precedentes.
El problema de todo esto es que en Cataluña los secesionistas están según quiero creer en minoría, pero los más acérrimos están colocados en todas las instituciones, decanos que aceptan aprobar con una sola prueba a los alumnos que van a la huelga.
Maestros y profesores que desde Primaria enseñan a sus alumnos a odiar al estado español.
Una televisión autonómica que machaca y machaca una y otra vez sus mentiras y solo defienden a su maldito procés, atacando e insultando todo lo que provenga de España.
No quiero ni pensar cómo serán los niños que ahora tienen entre cinco y diez años, dentro de diez.
La cuestión, según estos secesionistas, es que generan más que reciben y que son una raza superior. No sé porqué viendo a Torra, a Junqueras y a Puigdemont me recuerda mucho a Hitler, que defendía a capa y espada la raza aria y quería a toda costa su pureza, y él era el vivo ejemplo de cualquier cosa menos ario.
Los cachorros del procés se han convertido en fieras
Ahora nos toca vivir esta, serie de acontecimientos sin que Pedro I el guapo haga absolutamente nada, porque necesita su apoyo para gobernar y es tan sumamenre inútil como para decir, estando en Cataluña claro, que España es una nación de naciones y que Cataluña es una nación, para luego en un mitin fuera de Cataluña decir todo lo contrario.
Lo más preocupante de todo esto, es que aún hay mucha gente que votará a este individuo, que pasará a la historia únicamente por ser un desenterrador de muertos, profanador de tumbas, y llevar a España a la ruina total, si es que los españoles no despertamos y nos lo quitamos de encima de una buena vez.
Mientras tanto, el futuro de Cataluña acampa en el centro de Barcelona colapsando la ciudad, sin acudir a clase, desparramados por los suelos y por sendos sofás que les habrá regalado el Quim, sabiendo que ocurra lo que ocurra ellos estarán aprobados.
Y nosotros, los ciudadanos de bien, mirando desde fuera toda esta puesta en escena ridicula y grotesca, sin poder hacer nada hasta el día 10 de noviembre.