Las auténticas verdades del 11 M
Después de veinte años, solo podemos resolver las siguientes cuestiones:
Fue el atentado más grande en Europa del Siglo XXI.
La foto del error de Aznar, chuleando en las Azores con Busch y Blair, es muy probable que fuera el detonador de los instigadores, a pesar de que España no llego a enviar tropas a la guerra de Irak.
El PP no supo manejarlo y torpemente, sin pruebas, le echó la culpa a ETA.
No se obtuvieron pistas concluyentes de que fuera de origen yihadista, ni tampoco Al Qaeda lo reivindicó (sí lo alabó) en ningún momento.
No se encontraron restos de metralla en los cuerpos de las víctimas.
Extrañamente, no les hicieron autopsias a los siete “suicidas de Leganés”.
Incomprensiblemente, a los tres días se comenzó con la destrucción de los trenes, que eran pruebas fundamentales, y todavía no se sabe quién dio esta orden.
Los verdaderos culpables, que siguen sin conocerse, han quedado sin condena, al haber prescrito este atentando, cuando estos crímenes nunca deben prescribir.
Provocó un cambio en el resultado de las elecciones del domingo siguiente (que debían haberse aplazado), pero sobre todo provocó una fractura radical en la sociedad española, que se mantiene hasta hoy.
Y ahora, el gobierno golpista de Sánchez, está aireando el 11M con todos sus tentáculos mediáticos, para tapar los gravísimos casos de la amnistía y el caso Koldo.
