¿De qué se ríe Pablo Iglesias?

Pablo Iglesias siempre se ríe. No es que sonría, sino que su risa tiende más a ser una carcajada disimulada. Para nosotros, desde el interior de su curvado cuerpo y alma Pablo Iglesias se descojona de todo lo que está ocurriendo y de todo lo que le rodea. Pablo Iglesias se ríe de tener el mismo nombre del fundador del PSOE, partido al que aspira dividir y fagocitar como hicieron los comunistas en la ante sala de la Guerra Civil. Para él debe ser un signo de las estrellas; una señal del cielo (terrenal) semejante a la de haber heredado (como los reyes) el trono revolucionario de su padre, miembro del grupo terrorista FRAP (por cierto la “P” era de Patriótico).

Pablo Iglesias se ríe, porque la vida le va bien. Y no sólo ahora, sino desde hace tiempo. Sin dar un palo al agua, consiguió un puesto de Profesor Titular interino en la Complutense. Ya sabemos que estos puestos de interino, por aquella época, se daban a dedo y sin necesidad de ninguna oposición. Sólo bastaba tener carnet de alguna organización de izquierdas, y la capacidad de pelotear baboseando lo suficiente sin que se notara.

360 Global Media, es el entramado mediático de Podemos y ha recibido del pacifista, feminista y tolerante Irán, alrededor de 9,5 millones de euros

Pablo Iglesias se ríe. Porque su trabajo en la “Complu” no le daba mucho ídem, y no sufrió la explotación del capitalismo. Por si acaso, se buscó un buen negociete en 360 Global Media por presentar el programa «Fort Apache» en Hispan TV, una extensión de la TV iraní (sí esos tipos que cubren a sus mujeres como un edredón y de vez en cuando las estopan como a una alfombra. Todo muy progre). A los iraníes, por unos pocos programas les facturó casi 100.000 euracos con los que luego intentó realizar malabarismos fiscales para no pagar un centavo a Hacienda. Él no dejaba de petarse de lo fácil que era tomarle el pelo al Estado español.

Pablo Iglesias se troncha. Se puede decir que 360 Global Media, es el entramado mediático de Podemos y ha recibido del pacifista, feminista y tolerante Irán, alrededor de 9,5 millones de euros. Para partirse. Pero esto sólo es el principio de tanta carcajada que pone en riesgo su mandíbula batiente. Resulta que Iglesias y Monedero descubrieron por casualidad un país que se llamaba Venezuela que estaba gobernado por comunistas muy ricos como ellos. Pablo Iglesias, volvió a sonreír cuando le ofreció dinero un tal Nicolás Maduro que depositó en cuentas offshore.

Resulta que Iglesias y Monedero descubrieron por casualidad un país que se llamaba Venezuela que estaba gobernado por comunistas muy ricos como ellos.

Resulta que Iglesias y Monedero descubrieron por casualidad un país que se llamaba Venezuela que estaba gobernado por comunistas muy ricos como ellos.

Los malditos “fachas” de Hacienda dicen que ahí se acumularon cientos de miles de euros. Pero la suerte no se le acaba a Pablo Iglesias y sigue riendo, y su mandíbula ya corre peligro. El motivo de tanta alegría es que descubrieron un país llamado Bolivia. Es un país muy raro porque a pesar de ser muy pobre y estar explotado por los Estados Unidos, a su Partido le ha dado más de un millón de euros. Había un tal Evo Morales, que debía cortarse el pelo en Llongueras, que le encantaba una cosa que se llama Pachamama. Iglesias cree que es como una teta de la que salen euros para destruir la máquina que fabrica euros (léase, el capitalismo).

Pablo Iglesias se está quedando sin fuerzas. Y no tanto por que debe encargarse de las faenas paritarias de su humilde casita, casi sin empleados ni Guardias Civiles que la protejan (qué injusto es el capitalismo), sino que se debilita porque cada mañana se despierta patiéndose el pecho. En lo primero que piensa es en el destino de su íntimo “amigue” Errejón. Claro, con ese nombre tan taurino no podía tener mucho futuro en Unidas Podemos (-joderte-, añade cada mañana Pablo Iglesias cuando se despierta).

Había un tal Evo Morales, que debía cortarse el pelo en Llongueras, que le encantaba una cosa que se llama Pachamama. Iglesias cree que es como una teta de la que salen euros

 

Pablo Iglesias, sino fuera porque tiene los dientes más deshilachados que una fila de borrachos bailando la Conga, podría protagonizar un anuncio de Profident. Siempre la boca abierta, dispuesto a mostrar su sonrisa, asustando a los niños pero autocomplaciéndose de su suerte. Ahora ya es vicepresidente del Estado que tanto odia y desea destruir. Pero tiene un dilema. Él y su mujer (que tanto ama a sus servidores y guardaespaldas) cobran juntos más de 30.000 euros al mes del Estado que odia.  Por las noches Pablo Iglesias también duerme riendo, pues sueña complacido que su mujer es más hortera que él y Echenique no lo tiene tan bien para seguir ascendiendo (cosas de la no adecuación a la movilidad para discapacitados del Congreso de los Diputados. Por cierto el Congreso está lleno de discapacitados mentales, alguien tendría que hacer algo).

Pero ahora viene lo mejor. Pablo Iglesias, se desternilla porque ha dado orden de que su partido, Podemos, ya no pague las sedes del Partido en España y cada agrupación se tendrá que buscar la vida. Además se despiporra con el próximo Congreso de Vistalegre III. En el anterior prometió que no se presentaría a la reelección, pues tenía que dejar paso a una mujer (no sea que le acusaran de heteropatriarcal). Pero le ha entrado la risa floja al decidir faltar a su promesa y volverse a presentar. Sabe que el alzhéimer en la izquierda es muy frecuente y que nadie se suele acordar de las promesas dadas por otros. Sobre todo si el que lo prometió es el que se dedica a purgar el partido de indeseable “fachas” morados que quieren que en Podemos haya una democracia interna.

Pablo Iglesias está que se sale de gozo. Pero su querida Montero ya le ha dicho que toca ir al dentista. Tanta risa con tan mala dentadura no puede ser bueno para un cartel electoral. Hay que mantener una familia, seis asistentes y una casita en Galapagar y no se puede jugar con el futuro. Una cosa es España y otra su entrañable familia revolucionario-tradicional numerosa.

Javier Barraycoa

Profesor universitario, sociólogo y politólogo. Escritor y articulista. Co-fundador de la asociación Somatemps.

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